Estábamos en casa de Javi, tomando una cerveza y hablando del viaje en moto de este año (que si Portugal, que si la isla de Man) cuando de repente Manu suelta el bombazo:
-vosotros vereís, pero yo el año que viene me hago el Panda Raid.
Y después del desconcierto inicial (yo, no sé por qué, me vi en China detrás de osos bicolor), explicó que es un raid que hay que hacer en un Panda o Marbella, que recorre Marruecos desde Tánger hasta Essaouira y que el objetivo es llevar material escolar y entregarlo en alguna escuela del camino.
Rápidamente nos empezamos a hacer p**** mentales que se fueron materializando. Buscamos un cuarto componente, y tras algún que otro candidato se apuntó Juan, manitas, espeleólogo y, sobre todo, mi primo. Buscamos un nombre para el equipo: cincuentayochoº (58º es la temperatura máxima que se alcanza en el Sáhara). Buscamos dos coches, y los encontramos en seguida.
Pero eso os lo contaremos en la próxima entrada.
Isaac.
